1.
¿QUÉ ES LA CANDIDIASIS?
2. ¿SE PUEDE PREVENIR?
3. ¿CÓMO SE TRATA?
4. TERAPIAS NATURALES
5. EN POCAS PALABRAS
1.
¿QUÉ ES LA CANDIDIASIS?
La candidiasis es una infección oportunista común en personas VIH
positivas. Es una infección causada por un hongo común llamada candida. Este
hongo se encuentra en el cuerpo de casi todas las personas. Un sistema
inmunitario sano lo mantiene bajo control. La candidiasis generalmente
infecta la boca, la garganta o la vagina.
Puede desarrollarse meses y hasta años antes que otras enfermedades
oportunistas más graves. Para más información sobre infecciones oportunistas
lea la hoja informativa 500.
En la boca la infección se llama candidiasis bucal o
aftas. Cuando la
infección se disemina hacia el interior de la garganta se llama esofagitis.
Tiene el aspecto de parches blancos, similares al queso cottage, o aparece
como manchas rojas. Puede causar dolores de garganta, dolor al tragar,
náuseas y pérdida de apetito.
En la vagina, la infección se llama vaginitis. La candidiasis vaginal es una
infección común. Los síntomas incluyen picazón, quemazón y flujo espeso
blanquecino.
También puede extenderse y causar infección en el cerebro, el corazón, las
articulaciones y los ojos.
2. ¿SE PUEDE
PREVENIR?
No hay ninguna manera de prevenir la exposición a la cándida.
Generalmente no se usan medicamentos para prevenir la candidiasis, debido a
los siguientes motivos
- No es una
condición muy peligrosa.
- Existen medicamentos efectivos para tratarla.
- El hongo podría desarrollar resistencia a los medicamentos.
La mejor manera de
prevenir un episodio de candidiasis es tomar una combinación de medicamentos
antirretrovirales (ART) que fortalezca el sistema inmunitario.
3. ¿CÓMO SE TRATA?
Un sistema inmunitario sano mantiene un buen balance. La bacteria normal
del organismo también sirve para mantener al hongo bajo control. Algunos
antibióticos eliminan este tipo de bacteria beneficiosa, lo que ocasiona el
desarrollo de candidiasis. El tratamiento de la candidiasis no elimina al
hongo pero lo mantiene bajo control.
El tratamiento puede ser
localizado o sistémico. El tratamiento localizado
se aplica sobre la zona infectada. El tratamiento sistémico afecta a todo el
cuerpo. Muchos proveedores de servicios de salud prefieren usar primero el
tratamiento local. Éste permite que el medicamento actúe directamente en la
zona infectada. Causa menos efectos secundarios que el tratamiento
sistémico. Además, existe menos riesgo de que la cándida desarrolle
resistencia a los medicamentos. Los medicamentos que se usan para combatir
la candidiasis son anti-hongos. Sus nombres terminan casi siempre en "azol".
Estos incluyen clotrimazol, nistatina, fluconazol e itraconazol.
Los tratamientos locales incluyen:
- Cremas
- Supositorios para la vaginitis.
- Líquidos.
- Pastillas que se disuelven en la boca.
- El tratamiento local puede causar irritación o punzadas.
El tratamiento sistémico es necesario si el local no funciona o si la infección se ha
diseminado al esófago (esofagitis) u en otras partes del cuerpo. Algunos
tratamientos sistémicos están disponibles en pastillas. Los efectos
secundarios más comunes son náuseas, vómitos y dolor abdominal. Menos del
20% de las personas padecen estos efectos secundarios.
La candidiasis puede reaparecer muchas veces. Algunos proveedores de
servicios de salud recetan medicamentos anti-hongos a largo plazo. Esto
puede provocar resistencia. El hongo puede mutar y el medicamento deja de
funcionar.
Algunos casos graves no responden a estos medicamentos. En esta instancia se
puede usar anfotericina B. Éste se administra en forma oral o intravenosa,
es muy potente y tóxico. Los efectos secundarios principales son problemas
renales y anemia, pero también pueden ocurrir escalofríos, fiebre, náuseas,
vómitos y dolores de cabeza. Generalmente desaparecen después de las
primeras dosis.
4. TERAPIAS NATURALES
Algunos tratamientos que no son medicamentos parecen funcionar. Sin
embargo, no han sido estudiados con el suficiente cuidado como para
demostrarlo.
- Reduzca la cantidad de azúcar que ingiere.
- Tome té de Pau d'Arco. Se hace con la corteza de un árbol de
Sudamérica.
- Tome suplementos de ajo o coma ajo crudo. El ajo tiene propiedades
anti-hongos y antibacterianas. Sin embargo,
puede interferir con los inhibidores de la proteasa.
- Hágase gárgaras con aceite del árbol del té (tea tree oil en inglés)
diluido en agua.
- Tome cápsulas de lactobacilus (acidófilus) o coma yogurt que contenga
dicha bacteria. Asegúrese que dice que el
producto contiene culturas activas y vivas. Puede ser útil si lo
toma después de tomar antibióticos.
- Tome suplementos de ácido gama linoleico y Biotin. Éstos parecen
demorar la diseminación de la cándida. El ácido
gama linoleico se encuentra en aceites extraidos en frío. Biotin es
una vitamina B.
5. EN POCAS
PALABRAS
La candidiasis es una infección por hongos muy común. El hongo
normalmente vive en el cuerpo y no puede ser eliminado por completo. La
mejor manera de evitar un episodio de candidiasis es fortaleciendo el
sistema inmunitario mediante la toma de ART.
La mayoría de las infecciones por cándida pueden ser tratadas fácilmente con
medicinas de aplicación local. Estas infecciones pueden persistir en las
personas con un sistema inmunitario debilitado. En estos casos se pueden
tomar medicamentos anti-hongos sistémicos, pero la cándida puede volverse
resistente a los mismos. El medicamento anti-hongos más potente,
anfotericina B, provoca serios efectos secundarios.
Hay varias terapias naturales que parecen controlar las infecciones con
cándida.
Fuente: aidsinfonet.org